Sigue el reclamo de un hombre en Pami para que atiendan a su madre: “Vinieron a apretarme para que no me encadene”

Justo cuando Cergio López se estaba encadenando en la puerta de las oficinas de Pami en Villa Mercedes, le avisaron que en su casa estaban los médicos para ver a su mamá. Por ese motivo tuvo que levantar el reclamo, y lo hizo con mucho desánimo.

Si no iba corría el riesgo de perder toda la gestión que había logrado. Entonces se subió a la bicicleta y regresó al Barrio Ciudad Jardín, uno de los más alejados del centro. “Tengo más de una hora de viaje, por qué no me dicen con tiempo y me quedo a esperarlos ¿Por qué juegan de esta manera? Qué falta de comunicación”, cuestionó este lunes cerca de las 11 cuando habló con El Chorrillero.

Ese era el cuarto día de reclamo en la obra social que está manejada en la provincia por Alberto Rodríguez Saá, y que tiene como coordinador en Villa Mercedes a Diego González: el funcionario que quería ser gobernador y que se presentó dentro del lema oficialista en las elecciones del 11 de junio.

En concreto, González nunca se sentó a hablar con López, no le ha mostrado ni siquiera la cara.

“Vinieron de gusto, a apretarme para que no me encadene, a asustarme nada más”, comentó el hombre que insiste por una atención para su madre de 89 años que está en silla de ruedas. Los profesionales iniciaron así una evaluación de la situación.

“La revisó el médico y volvieron a cargar el módulo 2. La asistente social me hizo preguntas, por ejemplo, a qué me dedico, y nada más”, señaló esta tarde al ser consultado.

Al mismo tiempo dijo que ya se cansó de todo eso: “Voy a buscar un abogado”.

Hasta el momento, López logró que vaya una enfermera a realizar las curaciones a la mujer, pero quiere una atención integral que no está aprobada.